En nuestro colegio Juan Pablo II- Santo Ángel, hemos celebrado con mucha ilusión, una ofrenda floral a la Virgen de Lourdes, Patrona de nuestro pueblo desde principios del siglo XX.

Por aquel entonces el  R.P.  D. Francisco Tarín, en el año 1990, recorría los pueblos gaditanos para fomentar y difundir la devoción de María. Hablaba con entusiasmo de los favores que eran otorgados a los fieles que peregrinaban al pequeño pueblo de Lourdes, guiados por su fe.

Por esa fecha  era párroco de la iglesia Mayor prioral de la Villa, D Francisco Ramírez Cuevas, quien decidió construir una gruta en la cabecera de la nave del Evangelio, con el fin de colocar una imagen de la Virgen bajo la advocación de Lourdes.

El día dos de  mayo del año 1911 se organizó el Triduo inaugural de la capilla y el día cinco de ese mismo mes  se celebró una Eucaristía  para la bendición de la esperada gruta. A dicha celebración acudió una joven que padecía “tuberculosis ósea”, una enfermedad incurable. Llegado el momento de la comunión se produjo la sanación de la mencionada joven que fue a comulgar totalmente sanada.

Desde entonces se produjeron múltiples peregrinaciones a la Villa de Puerto Real. Este hecho, entre otros motivos, llevó al pueblo de Puerto Real, a su Ayuntamiento y al personal eclesiástico, a realizar la petición al Papa Pío X del patronazgo de la Virgen de Lourdes para nuestro precioso pueblo. Gracias a todos estos hechos, el día nueve de abril de 1913, fue proclamada Patrona de Puerto Real la Virgen bajo la advocación de Lourdes. El 11 de Febrero, es el día de nuestra Patrona.

Para celebrar el dicho día, los alumnos han realizado una oración a nuestra Señora de Lourdes y han cantado posteriormente la canción “La Virgen de Lourdes de Puerto Real” mientras se realizaba la ofrenda floral, donde las flores blancas adornaban nuestro patio de recreo. También han llevado alimentos para ayudar a las personas más necesitas. Posteriormente un grupo de alumnos de nuestro colegio llevó todas las flores a la Prioral de San Sebastián. Allí se realizó una entrañable oración y se encomendaron a la Virgen de Lourdes.

Los niños han disfrutado de todos los actos que se han organizado. Y nunca nos cansaremos de decir: ¡Viva la virgen de Lourdes de Puerto Real!